viernes, 24 de agosto de 2012

Hey Soul sister, Let me tell you something.

Dicen que después de la tormenta viene la calma, que si miras entre las nubes, puedes ver las estrellas, que detrás de toda esa oscuridad hay un atisbo de luz esperando a brillar de nuevo.
Pero no siempre es tan fácil. No siempre resulta sencillo pensar que todo se resolverá, que no es tan grave, o que con el tiempo todo será más llevadero, y es que a veces los problemas, por el simple hecho de serlos son complicados, difíciles,… o por si fuera poco, son como el papel higiénico, tiras de uno y salen diez seguidos, porque basta con que salga cualquiera de ellos para que el resto le sigan…
Y todo te parece más triste, la realidad ha perdido color, se aparece casi en blanco y negro. Hay poca gente y todos dan la impresión de sentirse aturdidos, ni siquiera una pareja, alguien riéndose, alguien escuchando música que sigue el ritmo moviéndose con la cabeza, que va contando las rayas del suelo, o gente con incontrolable prisa, como si no fuera a llegar nunca y llega tarde.

No te voy a decir que las cosas cambian de la noche a la mañana, que todo se resuelve como si de un golpe de magia se tratara, coge color y empieza a sonar música, porque no es así, pero si voy a decirte que hay pequeñas cosas, ya las conoces, porque igual que haces un mundo de un grano de arena, exageras la felicidad de un pequeño gesto, un detalle, ya las conoces, esas pequeñas cosas. 
Sólo te pido que sigas un consejo, y es que te dejes llevar. Porque si miras a tu alrededor, hay gente, amigos, personas que incondicionalmente o causalmente sólo quieren una cosa y aun no lo saben. Quieren verte feliz.

Porque, sí. Problemas tenemos todos, es algo que no podemos evitar, que depende del grado de importancia que tengan para que influyan de una manera u otra en cada uno de nosotros, pero puedo asegurarte que como mi abuela decía, en esta vida, todo tiene solución excepto la muerte.

Piensa que por muy larga que sea la espera, merece la pena no perder la esperanza, que las hojas crecen, caen y vuelven a crecer. Te invito a bailar con el mundo, a contemplar un amanecer, a viajar, a probar cosas que nunca hiciste, a subirte a la cima de una montaña y gritar, a sentir miedo, y superarlo, a perderte en medio de la nada, y a hacer cualquier cosa que te haga sentir bien.

No hay comentarios:

Publicar un comentario